Entre otras causas, el frío o la humedad pueden hacer aparecer sabañones en algunas zonas del cuerpo, que son unas lesiones en la piel.
En concreto, un sabañón es un enrojecimiento e inflamación bajo la piel que suele causar picor y dolor en la zona. Normalmente sucenden en el lóbulo de la oreja, los dedos de los pies o de las manos, la nariz o las mejillas.
Hay algunas formas que pueden ayudar a reducir los sabañones de forma casera como:
- Masajear bien la zona con: unas gotitas de limón, pepino, jengibre o aceite de romero.
- Aplicar en la zona una mezcla hecha con un poco de cebolla y sal.
- Aplicar en la zona una pasta hecha con la pulpa de una patata asada hecha puré.
- Hervir agua con hojas de nogal, y con la ayuda de un algodón aplicarlo en la zona. Después nos podemos aplicar agua fría.
También podemos frotar sobre la zona afectada con ajo pelado o aloe vera, unos ingredientes antibacterianos e hidratantes.
Lo mejor es poder evitar que la aparición de sabañones abrigándonos bien, evitar los cambios fuertes de temperatura, tener un calzado adecuado y tener una alimentación completa y equilibrada, sin que nos falte la vitamina A y C. Aún así, es mejor la recomendación de un médico.
Esperamos que os sean útiles estos consejos.